miércoles, enero 18, 2006

Osama en pelotas...

Por Osama Ben López

Dicen los que saben de fútbol (capaz que Yoda hasta de eso cache) que las pretemporadas en el deporte rey sirven para ir viendo, probando y planificando. Entonces, tal como lo hizo “El Conce” frente a Colo Colo
en el exitoso partido amistoso (que bueno que la gente de esta ciudad se despercuda un poquito) es menester que los medios de comunicación aprovechen para afinar detalles.
De los ‘condoros’ de TV8 o Canal Regional en la cobertura del evento no me referiré porque hay especialistas en el blog que deben haber reparado en ellos. ¿Pero las radio? Ahhh, esos los descuero yo.
Inés de Suárez (sin Vidal que ahora se cree ‘rostro’) no mostró refuerzos en su plantel. Con la consabida sapiencia de Marcos Muñoz Lavín en el relato (sabe más que los débiles comentaristas de su programa incluso) se afirma una transmisión con gusto a poco. El grave problemas de Muñoz es que, para destacar debe apelar a tener escuderos que hagan la función del “arroz graneado”, o sea, el adorno, el acompañamiento de su talento. Si antes fue un enredado Jorge Godoy Palma, ahora se anota con Victor Manzano, que de informador de campo pasó a comentarista sin aprobar los cursos. Esto es, bagaje futbolístico, facilidad de verbalización de ideas, amplitud de conceptos futboleros, etc. Si usted está en el estadio no tiene para qué escucharlo porque no le va a portar nada que no haya visto. No hay análisis. Tampoco de su reportero Carlos Montes que muestra evidente carencia de pronunciación fina. Muñoz, buscate un comentarista que te revitalice porque tu calidad se desvanece entre tanta mediocridad que te rodea.
Tampoco se reforzó Pasión de Multitudes de Interamericana. David Cisternas relata bien pero no es una luminaria ni nada parecido. Peor cuando intenta apelar al arte del juglar deportivo con frases tan rebuscadas y horrendas como “esculturíceme la jugada desde la cancha”. Eso es definitivamente rasca. Luis Oñate Palacios es el comentarista antiguo (ese que hablaba largo y tendido a los 15, 30 y 40 minutos interrumpiendo el ritmo de la transmisión o incluso la narración de un gol con formato agotado y pasado de moda), aquél especímen llamado “riflero” que no aporta nada, que poco concepto de fútbol maneja y que con pésima dicción puede decir “ssshileno” al aire. Jorge Schmidt es el director del programa que extrañamente se va a cancha y entrevista “como la mona”. Poco consistente en las preguntas. Muchachos, no pierdan al relator comercial que “salva la plata”. Femenina también estuvo al aire. Es un equipo armado pero que carece de lo mismo que sus pares. No tiene comentarista. Rolando Alarcón intenta suplir la función pero el es un conductor clásico y cuando debe sacar a relucir sus conocimientos en la materia de los expertos demuestra que no los tiene. Interrumpe a los noteros con preguntas absurdas y no apunta datos contundentes. Es ágil en mantener la dinámica del programa pero no cumple la función que anuncia la presentación. Es el émbolo del segmento pero lo de “comentarista” tiene relación con un especialista que entrega pinceladas convincentes. Alarcón es superfluo en ello. Los reporteros son jóvenes, rápidos, “vivos”, escurridizos y no se extienden en el “bla,bla”. El locutor comercial, Carlos Fernández es de los mejorcito en el medio local, todo mientras no “muestre la hilacha” con los comentarios ordinarios que ostentan su “sobredosis de barrio y cuneta” al aire. Y Jaime Andrés Vasquéz se consolidará en el relato mientras no le siga la huella a Alarcón Y Fernández en hacerse el chistoso y dedicarse a crear un estilo.
Resumen, pese a no salir al aire (se cayeron al igual que los “tatitas” de Radio Llacolén), Golazo en la UBB sigue siendo la que manda en el medio de “los peloteros”. No porque sean la panacea sino porque simplemente se dan poca maña para aceptar gente que “no tiene dedos para el piano”.

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