Por Manuel Gordíguez desde la papa misma...
Se nos jué el naranjero López, más conocido como el chico López, y para los que lo estimaban menos como el enano maldito. La decisión la tomó Montalba que es muy asumido en esto de determinar que las tareas de los periodistas las hagan los periodistas. López lo único de periodista que tenía era que pertenecía al Opus Dei y sus camaradas lo afirmaban. Montalba lo tenía atravesado porque no lo pudo sacar a la primera pero a la segunda le resultó.
Hay otros en salmuera, el suizo Dertwiler, editor de deportes; Pincheira, de espectáculos, que es un especialista en cortar y pegar y Tito Matamala, el goma de López en el diario y en la Universidad del Desarrollo, un weón, como escriben ustedes, con patente de weón y flojo más encima.
Más noticias: varios cabros del diario El Sur se están trasladando pa Crónica. Todavía nadie cacha la movida, porque en el Club Concepción Montalba dijo que el proyecto diario El Sur va para transformarlo en tabloide. Concepción tendrá dos crónicas. Los Maira están calladitos y el Rafaelito ya no va a meterse a la sala de redacción para dar instrucciones como hacía antes. Brain se hace el que trabaja, los hombres de negro del Mercurio son los que le hacen la pega.
Montalba camina por los pasillos con el pecho inflado porque el diario cambió y a simple vista parece que entró adre nuevo. Cuenta muy serio que la circulación ha aumentado y que todo camina muy bien. En privado dice que los anteriores directores eran poco audaces y que tenían miedo de publicar muchas cosas. También es cierto, lo digo con conocimiento de causa.
