Escribe Osama Ben López , (uno nuevo esquitog qui contatagmo, oyi. The Chairman)
¿Qué estas haciendo gil? Si este blog es de televisión... Así bramó en holandés The Chairman al leer estas líneas. Pero si usted pone un poquito de atención en los formatos verá que el gran problema de la tele regional es que muestra un exagerado apego al formato radial. Como si estas últimas fueran la materialización de la panacea.
Critico entonces con toda la bronca a los empresarios radiales de la zona, que reciben proyectos y se los roban a los cabros nuevos para ponerlos en marcha de mala manera. Entonces, siguen eternizando a los cultores de la vieja escuela apernados por años al micrófono.
¿Por qué usted no tiene idea cómo se llama el "orejón" que lee las noticias en Canal Regional si también lo escucha en la radio? Porque los herederos de Nibaldo Mosciatti no conocen otra alternativa para posicionar el producto que echar mano a la costumbre primitiva que catapultó a su padre hasta el Olimpo. Pero estamos en el 21, y la moda es convertir a sus rostros en figuras conocidas. Si no miren como Cooperativa y W les ganan por goleada, aunque la consultora Litoral Press diga lo contrario. Esta última, como es de los mismos dueños del "9" no tiene peso ni moral. Sigo, Punto Siete es de la empresa y sólo es una mala copia de formatos como "Corazón" y "Amistad". Molde propio nulo.
Femenina y Oceanía le copian el estilo a todas estas. Se mantienen por años con lo mismo. No hay programas con contenido, tocan sólo canciones melosas en español, regaeton y lo que impone la tele como si todos fuésemos esclavos de "Rojo" y "Mekano" o no hubiésemos nacido con buen paladar. Tienen gente que no sabe hablar, no opina y que, al aire, lee todo del diario -otros incluso ponen audios de la tele- haciendo evidente su ignorancia. Conservan sus puestos gracias a que se venden por migajas al almacén auspiciante. El resto ni siquiera entra en el análisis.
Las radios AM son cultivo kitsch para gente AM. Las FM no debiesen pero las emulan y el circulo vicioso se agranda. Estos mismos comunicadores compran espacios en TV -cuando ejecutivos inescrupulosos no los llaman a jugar al animador-, los venden barato y hablan todo el rato en la pantalla olvidando que hay imagen que alimentar. Los directores son sus empleados part time y funcionan bajo la razón de que si el cliente pide basura, basura le dan.
Hace falta una radio joven, ¿No es esta la capital de los estudiantes? Una con discurso independiente y basada en las ideas y la música masiva pero decente e inteligente. ¿Cómo financiarla? Se puede. La globalización indica que las marcas necesitan posicionarse y tienen dinero para hacerlo. Falta que la oferta de tribuna sea generosa y útil.